Entre tanto película bodrio que Hollywood vomita al resto del mundo, es de agradecer que de tanto en tanto surja alguna joya que se gane el apelativo de Obra Maestro; este es el caso de Blade Trinity. Porque no os engañéis, a simple vista parece ser la típica americanada con tiros, artes marciales, explosiones y tias buenas de por medio, pero el director ha querido ir más allá y salirse de este cliché para profundizar más aún en la historia del cazavampiros mitad humano mitad vampiro. La crudeza de las imágenes (excelente trabajo de fotografía y de iluminación) quiere mostrar el aspecto más oscuro de la condición humano, simbolizado en la película con los vampiros. Porque este es el principal dilema que nos plantea el director al espectador: ¿Acaso no llevamos todos dentro una bestia desmembradora de humanos con ganas de cultivar personas en bolsas térmicas gigantes? Esta es la gran reflexión con la que nos quedamos cuando las luces de la sala se encienden. Sin embargo, este no es el único tema que se trata en el largometraje. La profundidad y el tacto con la que trata la relación entre Blade y su "maestro" (Weasler o como se escriba!) representa la eterna relación parental que se establece entre profesor y alumno, dejandonos momentos realmente dulces y sentimentales cuando Weasler dice algo asi como "verte solo me parte el corazón" sin inmutar un solo músculo de su cara y sin cambiar su tono monótono de diálogo; ¿acaso no es verídica esta secuencia? Personalmente en aquel momento, pensé realmente que esos dos tipos existían de verdad; como siempre Kriss Kristopherson y Wesley Snipes están a la altura, mostrando altas cuotas de credibilidad y realismo con sus interpretaciones.
También es curioso como varias películas se "ponen de acuerdo" a la hora de abordar ciertos temas como el de la eutanasia. Sí, en efecto. Blade Trinity tampoco se mantiene al margen de la polémica y nos llega al corazón con escenas tan duras como la desconexión de los cuerpos comatosos envueltos en paperfilm...sniff sniff...se me cae la lagrimilla con pensarlo...¿era compasión lo que el cazavampiros de ébano sentía entonces o era verdadero amor?
Hemos de resaltar también el sublime trabajo de los guionistas con esos diálogos tan ricos y llenos de humor ácido e inteligente, propios de una película de Woody Allen. A la historia del cine pasarán diálogos como: "¿Follas mucho?" "Si, mucho. Con mujeres."
Tampoco tienen mucho que envidiar a los guionistas los encargados de la documentación para dotar a la película la rigurosidad científica que caracteriza a la saga: proteínas elásticas, enzimas creadores de genes, mutaciones vampíricas en perros, hemólisis extracorporea inducida, y el concepto de Prototórax (aunque yo lo llamaría mejor Oncotórax /por lo de presión oncótica/).
Aún quedan muchas cosas por analizar de la película pero paciencia, poco a poco. Ahora, ¿que opináis?
2 comentarios:
¡Hay que ver cuánto ha cambiado el cine desde que éramos chavales! Antes el negro se quedaba solo y se lo cepillaban de dos guantazos. Ahora mueren las SWAT, quizá por el mero hecho de llevar máscara (igual darán menos lástima).
De todas maneras hemos mejorado, antes ganaba la tía más buena; ahora pasa lo mismo pero la mala también da morbo.
Por último estoy de acuerdo en que se adopten estos nuevos "términos" científicos cómo "Prototórax" y "malacirculación" en nuestra vida diaria.
No hay duda de que claramente esta es una película destinada mayoritáriamente al público masculino, no obstante yo he de agradecer que el director, los guionistas o quien quiera que fuese pensase en las pobres amigas, en las sufridas novias que han de acompañar a esos chicos a ver tal bodrio. Y doy las gracias en nombre de todas porque yo,como el director creo indispensable que las torturas al guapo de turno con abdominales de cuadraditos y pectorales de gimnasio, se le tortura y apresa con el torso desnudo!!!!
entre tanta vampira morbosa y cazavampira bombon, que menos que un peaso de tio cachas????
gracias, mil gracias porque por lo menos saqué algo de positivo de la película
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